SARE quiere compartir su lectura en el contexto del 20 de octubre y extender el último llamamiento a la manifestación convocada el sábado

Mañana se cumplen diez años de la decisión de ETA, de poner fin a su actividad. Diez años de un cambio en la realidad de este país, que ha abierto una oportunidad única para avanzar; tanto en la convivencia y la paz, como en el respeto al sufrimiento acumulado en décadas anteriores y a los DDHH de todas las personas. Una oportunidad única que, toca decir, hemos aprovechado en parte, ya que aún, se siguen manteniendo vulneraciones de derechos, tanto en la política penitenciaria, como en el reconocimiento de todas las víctimas. Debemos abordar todas las consecuencias y dar solución a todas las vulneraciones si de verdad queremos avanzar hacia esa convivencia tan necesaria.

Hoy, queremos iniciar dando las gracias a todas las personas que durante estos diez años handado, de manera responsable y realizando un gran esfuerzo, un paso adelante y han aprovechado esta oportunidad para avanzar;
• – desde su ámbito de trabajo, responsabilidad representativa o militancia
• – en la calle, desde la activación social
• – o como en el caso de muchas víctima, con sendos ejercicios de empatía.

Pero, como decíamos, esta oportunidad única que se abría hace diez años, la hemos aprovechado en parte. Porque, también creemos que nadie esperaba, que tras estos diez años, la situación de los presos y presas vascos pertenecientes a aquella organización ya desaparecida, estaría todavía hoy, a falta de lograr soluciones justas ante una vulneración de derechos, difícilmente compatible con un Estado democrático que quiera homologarse a las democracias europeas.

Es cierto que ha habido avances y así lo hemos manifestado desde Sare. Podemos hablar de un comienzo de cambio en la política penitenciaria que abre un camino hacia un cambio real, pero que solo seguirá avanzando si seguimos caminando todos y todas juntas.
Pero el fin de actividad de ETA, también debía ser en fin de la política penitenciaria de excepción. Si hace 10 años nos hubieran dicho, que el 56% de estos presos/as, estaría hoy aún en cárceles fuera de EH y a una distancia media de sus casas de entre 250 y 600 kms., no nos lo hubiéramos creído.

La pregunta que tenemos que hacernos es: ¿por qué los familiares de estos presos y presas tienen que continuar recorriendo estas largas distancias, cuando podrían estar aquí?.
Esto quiere decir, que a pesar del tiempo transcurrido desde la decisión de ETA, el alejamiento se mantiene. Son 104 presos/as, los que aún se encuentran fuera de los CCPP de EH.
Queremos transmitirles a Vds., que la práctica totalidad de estos 104 presos/as, a excepción de tres o cuatro, han solicitado ya, o lo están haciendo estos días, su traslado a cárceles vascas. Estas peticiones deberá aprobarla en primera instancia el Gobierno Español y después el Gobierno Vasco. Tenemos confianza en que el GV no rechazará ninguna petición. En todo caso, estaremos muy atentos a estos movimientos.

Desgraciadamente la política penitenciaria de excepción también se aplica en otras materias que afecta de manera negativa a estos presos/as y sus familias.

• Solo 10 presos, están en tercer grado penitenciario, cuando más de un tercio, unos 70 presos, deberían estar en esa situación y, 52 de ellos, con la aplicación de la libertad condicional. Esto quiere decir, que mientras que en el conjunto de las cárceles del Estado, el 93% de los presos, hacen con normalidad su transito de primer a tercer grado penitenciario, los presos vascos, continúan siendo una excepción y unicamente el 6% ha realizado este tránsito completo.
• También, el 90% tiene derecho a disfrutar de permisos penitenciarios, tras haber cumplido la parte correspondiente de su condena, para ello. Y no está siendo así.
• Nos encontramos además con el bloqueo por parte de la Audiencia Nacional, que enmienda las decisiones de las JJTT y bloquea cualquier avance.
• Pedimos, en este y en los demás casos, justicia y humanidad.
Es por todo esto que hoy, en vísperas de este aniversario, queremos lanzar un mensaje claro; estamos ante la necesidad de consolidar este cambio de la política penitenciaria. No podemos seguir alargando más esta situación. Porque cada día que pasa, son 24 horas más de vulneración de derechos.

Y para ello es imprescindible que como sociedad sigamos saliendo a la calle con esta reivindicación y que los y las responsables sindicales, políticos y sociales se impliquen también de manera activa.

En definitiva, hay motivos de sobra para decir que no se puede continuar manteniendo esta situación de vulneración de derechos. Que la convivencia en nuestro País, exige que se cierre este capitulo de confrontación y sufrimiento. Y esto puede hacerse si hay voluntad para ello.
Nos compete a todos, porque hablamos de derechos. De DDHH. De Convivencia. De Resolución. De paz.

Y es por ello, que para este 23 de octubre, no solo hemos invitado al conjunto de la ciudadanía a participar en dichas reivindicaciones. También hemos trasladado esta invitación a los y las representantes sindicales, políticos y sociales de Euskal Herria. Aunque aún no tenemos la respuesta de todas ellas, podemos adelantaros hoy que a esta manifestación asistirá una amplia representación de ex presos catalanes.

Desde aquí, queremos agradecer su apoyo y su compromiso con el cambio de la política penitenciaria y los DDHH de todos y todas las personas presas.

También queremos comunicar que los miembros del grupo musical Gatibu nos acompañarán este sábado en el acto final, compartiendo con todos nosotros varias canciones.
Mila esker, a todos y todas. Nos encontraremos el sábado a las 17.00 en el Túnel de la Antiguo.